Alimentación para los niños durante el verano

Con el verano llega el momento de relajarse, hace calor, las jornadas laborales se flexibilizan, los niños no tienen cole… Se dan en definitiva una serie de circunstancias que hacen que también las rutinas alimenticias cambien, ya no hay tantas prisas y con el calor tampoco apetece comer lo mismo.

Esto, que no es malo, si que puede acabar afectando negativamente al modo de alimentar a nuestros hijos.

Hay que tener presente que pese a no tener cole los niños siguen necesitando energía y una alimentación saludable. Con el calor van también a sudar más y a estar más cansados, por lo que será necesario introducir alimentos que les hidraten a la vez que les nutren. Puede que no todos los días tengan que comer guisados, arroces o lentejas, pero no se puede erradicar ningún grupo alimenticio, podremos cocinarlo de otra manera o sustituirlo por otro de la temporada que le aporte los mismos nutrientes.


El verano nos trae una serie de sabrosas y refrescantes frutas con gran cantidad de agua


Es por tanto el momento de disfrutar de las frutas que nos ofrece esta época del año. La sandía, el melón, las fresas, el melocotón, las cerezas o el albaricoque son las predominantes, su gran ventaja es que están compuestas en más de un 80% por agua por lo que son perfectas para hidratar a los niños cuando hace calor además de ser ricas en vitaminas y minerales. Se pueden ofrecer a los niños solas o en sabrosos batidos con lo que además los enriquecemos gracias a la leche. El verano es también tiempo de helados podemos preparar refrescantes y nutritivos helados en casa solo con leche, fruta y yogurt.

Con la parte de fruta bien cubierta no hay que descuidar las verduras, un gazpacho por ejemplo aporta gran cantidad de vitaminas a los niños además de resultar muy refrescante. Se pueden preparar también cremas y sopas frías. Las judías verdes, el tomate, el pepino sirven tanto pata sopas como para ensaladas. Las ensaladas nos ofrecen a su vez múltiples posibilidades si las elaboramos con pasta, arroz o incluso con alubias ofreceremos a los niños el aporte necesario de legumbres y cereales que no se debe descuidar pese a que estemos en verano. La patata también combina bien en una ensalada así como los frutos secos.


Hay que vigilar siempre que los niños toman una dieta equilibrada y fresca


Lo importante en cualquier época del año va a ser no dejar de lado ningún nutriente necesario en la dieta infantil, para ello deberemos fijarnos en los productos de temporada y aprovecharlos, teniendo en cuenta que si es verano deberemos apostar por productos más refrescantes y cocinarlos de forma que resulten atractivos para los niños.

Aunque sea verano es importante mantener las correctas pautas alimenticias, no descuidar ninguna comida, y no abusar de refrescos, golosinas y chucherías, en lugar de ello podemos apostar por lo batidos, los zumos y los helados naturales. El verano puede ser un buen momento para disfrutar de la comida de una forma diferente, y además los niños se darán cuenta de que las frutas y verduras son alimentos sanos y deliciosos.