El duro camino del bebé prematuro hacia los brazos de su mamá

Cuando nace el pequeño, su mamá sólo piensa en tenerle en sus brazos, verle su carita, abrazarle, darle mimos, cuidarle y dedicarse desde ese momento en cuerpo y alma para él. Pero en el caso de los bebés prematuros, este camino hacia los brazos de su mamá se hace más largo y a veces incluso más complicado.

De este modo, se considera que un bebé es prematuro cuando nace antes de la semana 37 de gestación y por ello suelen tener un peso inferior a lo habitual, en torno a los 2,500 gramos.

Aunque es cierto que son muchos los pequeños que nacen antes de la fecha prevista y de que se cumplan los nueve meses de embarazo, en la mayoría de las ocasiones no hay complicaciones, aunque los pequeños requieren más cuidados.


En muchos casos se intentará retrasar el parto lo máximo posible


De este modo, si la mujer empieza a notar y a tener síntomas de que el parto llega, mediante ciertos fármacos en el hospital se intentará retrasar el momento del nacimiento, aunque lo cierto es que no siempre puede conseguirse. Finalmente,si no se puede controlar, el pequeño nacerá con antelación y, en vez de ir a los brazos de su madre, irá directamente a la incubadora.

Así comienza un proceso en el que día a día se controla al pequeño para que evolucione favorablemente y siga creciendo y desarrollándose, como si aún estuviera dentro del vientre de su madre. Son días de incertidumbre para sus padres y de espera. De ir y venir del hospital, ya que, una vez que la madre se recupera, recibe su alta pero el pequeño tiene que quedarse en el hospital para conseguir estar en los niveles indicados como para poder salir.

Aunque en España aproximadamente un ocho por ciento de los recién nacidos son prematuros y se adelantan a su fecha, también cabe destacar que un alto porcentaje de estos casos finalmente son niños sanos y sin secuelas. Sin embargo, según los últimos estudios siguen aumentando los casos de prematuridad.


Causas de los nacimientos prematuros


Entre las causas de este hecho se destaca que hoy en día son muchas las parejas que recurren a tratamientos de fecundación in vitro y que, en algunos casos pueden dar lugar a esta complicación. También se debe a que cada vez las mujeres están retrasando más el momento de ser madres y esto influye en el desarrollo del embarazo. Asimismo, otras de las causas son el tabaquismo, así como el consumo o abuso de alcohol durante estos meses por parte de la futura mamá e incluso situaciones continuas de estrés, algo muy común en la sociedad en la que vivimos.

De este modo, aunque los padres viven días o semanas muy difíciles, ya que, no pueden estar con su pequeño todo el tiempo que quieren, temen que haya irregularidades en los análisis o informes, que el pequeño tenga dificultades para seguir evolucionando… en el momento en el que les dan la noticia de que ya ha alcanzado el peso y los valores adecuados y puede ir a casa con ellos, la felicidad les inunda. Sin duda, es un camino muy duro pero que afortunadamente en muchos casos, tienen un final muy feliz.