Reduce el riesgo de muerte súbita infantil en el bebé

Sólo con escuchar el concepto de muerte súbita infantil, muchos padres se echan a temblar, ya que se trata de un suceso aparentemente incontrolable e impredecible que puede ocurrir en cualquier momento a nuestro bebé. Por ello, conviene estar bien informado y seguir las recomendaciones que tenemos a nuestro alcance.

El síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL), sucede a bebés menores de 1 año y consiste en la muerte repentina, generalmente mientras duerme sin signos de sufrimiento.

Se presenta en niños aparentemente sanos por lo que los padres reciben un gran impacto emocional. La edad en la que más frecuentemente se presenta es de 2 a 4 meses.


No se conocen las causas de la muerte súbita pero sí se conocen los factores de riesgo


Actualmente, a pesar de existir numerosas investigaciones al respecto, aún no se han determinado las causas, el síndrome de muerta súbita del lactante se considera de origen desconocido. No obstante, se han establecido asociaciones de este terrible suceso con algunos factores, algunos de ellos son:

1. Humo del tabaco

Los bebés que son fumadores pasivos presentan mayor riesgo de padecer el síndrome de muerte súbita, ya que se han encontrado concentraciones de nicotina en los pulmones de muchos de los fallecidos. Los padres debemos mantener a los niños alejados del humo del tabaco siempre y mantener la casa libre de este tóxico.

2. Dormir boca abajo

Hace algunos años, se recomendaba acostar al bebé boca abajo para su mayor seguridad, sin embargo las recientes investigaciones apuntan a que esta es una de las prácticas más halladas en los bebés fallecidos por muerte súbita por lo que se recomienda lo contrario.

La postura más recomendada para el bebé es boca arriba, en la que los expertos aseguran que éste respira con mayor facilidad. A través de esta práctica indican que ha reducido significativamente el número de muertes súbitas infantiles.

3. Temperatura de la habitación

La temperatura demasiado alta en la habitación es un factor asociado a la muerte súbita del bebé, Cuando en el ambiente existe demasiado calor, el bebé suele tener más dificultades para respirar. Conviene mantener la temperatura cómoda para el adulto.

La ropa de cama y la vestimenta debe ser acordes a la época del año y no abrigar demasiado al bebé, ya que podríamos causar el mismo efecto y dificultar su respiración. También debemos evitar introducir peluches, almohadas u otros accesorios en la cuna.

4. Alimentación artificial

Las evidencias apoyan la teoría de que la leche materna ayuda a prevenir el síndrome de muerte súbita en el bebé. Conviene, entre otros, por este gran beneficio, alimentar a nuestro bebé naturalmente siempre que sea posible.

5. Alimentación inadecuada durante el embarazo

La época prenatal es fundamental para el desarrollo del bebé, a pesar de no haberse determinado como la causa principal, los expertos afirman que una alimentación insuficiente del bebé antes de nacer, aumenta el riesgo de padecer síndrome de muerte súbita.

Factores como el sobrepeso de la madre, consumo de alcohol y drogas, se ha contrastado que aumentan la presencia del síndrome de muerte súbita en los futuros recién nacidos. Además la incidencia de estos factores aumenta el riesgo de parto prematuro, algo que también ha sido asociado al síndrome de muerte súbita.

6. Prevenir con el chupete

Las últimas investigaciones afirman que el uso del chupete para dormir, ayuda a abrir las vías respiratorias y separa la carita del bebé del colchón, por lo que reduce el riesgo de muerte súbita.