Control de la diabetes tras el parto

Muchas embarazadas tienen diabetes durante el periodo de gestación y, aunque en numerosas ocasiones desaparece una vez que el pequeño nace, en otros casos sí que persiste este problema y por ello, es importante que se controlen sus niveles de glucosa.

Y es que, hay mujeres que, aunque antes del embarazo no eran diabéticas, empiezan a sufrir este trastorno durante los meses de gestación y no desaparece incluso después del parto.

De hecho, los especialistas indican que un tercio de las mujeres que sufrieron la denominada diabetes gestacional siguen siendo diabéticas tras el alumbramiento. Es cierto que en algunos casos es muy leve y se denomina resistencia a la insulina.


Causas y síntomas de la persistencia de la diabetes gestacional tras el parto


Hay ciertos factores que pueden indicar o anticipar la posibilidad de que la mujer siga presentando esta enfermedad, a pesar de haber dado a luz y no padecerla antes. Por ejemplo, en el caso de que la mujer sea obesa o tenga problema de sobrepeso influirá significativamente en el hecho de que persista este problema, así como si le diagnosticaron la diabetes gestacional casi al comienzo del embarazo.

De un modo u otro si sufrió diabetes gestacional deberá someterse a controles cada seis o doce semanas tras el nacimiento de su pequeño. Además, aunque tras el parto, los resultados no indiquen que los niveles de azúcar están altos sino dentro de lo normal, se recomienda seguir este chequeo durante tres años para confirmar que dicha enfermedad haya desaparecido finalmente. Y es que, será conveniente controlar esta cuestión y acudir sin falta a estos controles.

En estos casos también habrá que prestar atención al pequeño durante su infancia para comprobar si presenta resistencia a la insulina o para evitar que presente alguno de los factores que favorecen la aparición de este problema como es la obesidad. Y es que, de hecho, numerosos estudios han demostrado que los hijos de mujeres que tuvieron este problema durante el embarazo tienen mayor probabilidad de sufrir sobrepeso durante sus diez primeros años de vida. Asimismo, también es mayor el riesgo de que sean diabéticos.

Por otra parte, a pesar de ello, será conveniente que la madre amamante a su pequeño, ya que la lactancia materna es muy positiva y puede ayudarle a perder peso tras el parto, un factor importante para prevenir este problema.


La lactancia materna ayuda a superar la resistencia a la insulina de la madre


De este modo, será importante que la mujer se someta a dichas pruebas y revise su nivel de azúcar, ya que así sabrá cómo actuar si sigue teniendo diabetes. De hecho, hay muchas mujeres que, tras el parto, no acuden a su médico para que les realice las pruebas pertinentes y el hecho de no saber que tienen este problema puede llegar a acarrearles consecuencias negativas que, fácilmente, podrían haber evitado.

Por último, es importante saber que, tanto durante el embarazo como después deberá ser consciente de la importancia de seguir una dieta equilibrada y sana, así como mantener un peso adecuado. El ejercicio será también fundamental y un buen aliado, ya que le ayudará a disminuir la posibilidad de desarrollar o presentar diabetes e incluso a posponer su aparición.