La depresión prenatal afecta al desarrollo del bebé

En ocasiones, las mujeres se sienten deprimidas durante el embarazo y las causas pueden ser diversas. Puede deberse, tanto al miedo o agobio ante la inminente llegada de su bebé y el temor a no saber hacerlo bien, así como a cambios hormonales que le hacen sentir así e incluso también a factores sociales.

Es decir, en ocasiones, la realidad que rodea a la mujer no es la más adecuada y por ello, puede llegar a influir en su estado anímico.

Es muy importante que se detecte si la mujer tiene depresión, ya que las consecuencias de este trastorno durante el embarazo pueden ser negativas, llegando a influir incluso en el desarrollo del pequeño. Así, aunque en ocasiones, se piensa que esa sensación de cansancio, estrés o desgana puede deberse a los propios cambios que está experimentando por el embarazo, es importante asegurarse de que no se trata de una depresión prenatal.


El desarrollo del bebé está condicionado por el estado de ánimo de la madre


Un estudio realizado por investigadores de Reino Unido saca a la luz importantes conclusiones sobre las consecuencias de este estado depresivo durante el embarazo. De este modo, se reflejó que las madres que se sienten así durante los meses de gestación suelen tener bebés que se caracterizan por tener un desarrollo más lento de lo que se considera habitual.

Para llevar a cabo dicho estudio tomaron como muestra aproximadamente a once mil mujeres que habían sido madres en un intervalo de dos años. En primer lugar se evaluó el nivel o grado de depresión que habían sufrido durante los nueves meses de gestación y acto seguido se valoró la posible relación entre ese estado y los problemas de desarrollo cognitivo que presentaban los pequeños.

Lo cierto es que los resultados fueron concluyentes, ya que de las que habían tenido este trastorno, se demostraba que en el caso de las mujeres que habían sufrido depresión durante prácticamente todo el embarazo, presentaban un 50 por ciento más de probabilidades de tener hijos con este tipo de problema e incluso de tener bebés prematuros.

Del mismo modo, otra investigación llevada a cabo por la Universidad de California en Irvine también se centraba en analizar cómo influye la depresión materna en la salud del bebé y en el desarrollo de sus capacidades motoras. En este caso, se siguió durante un año a 221 mujeres embarazadas, que se dividieron en grupos, en función de si no tenían síntomas, aquellas con síntomas antes e incluso después del embarazo y por último, aquellas que sólo demostraron este estado depresivo al comienzo o al final de dicho estudio.


Un estado de ánimo depresivo y triste genera un menor desarrollo del bebé


Se llegaba a la conclusión de que los pequeños que tenían un mejor desarrollo eran los de aquellas madres que no habían tenido este trastorno o tan sólo habían estado deprimidas en periodos breves al comienzo del embarazo o después de que el pequeño naciera.

Aun así, no se saben los motivos de que este estado influya en el feto. Sólo se baraja la posibilidad de que este estado psicológico de la madre provoque el aumento del nivel de hormonas relacionadas con la ansiedad o el estrés y que eso finalmente acabe transmitiéndose al bebé.