Consejos para recuperarse en el posparto

Durante el embarazo, las futuras mamás suelen recibir mucha información acerca de la gestación y del momento del parto, sin embargo, en muchas ocasiones no existe conciencia de lo importante que es prepararse para el proceso de recuperación posparto, en el que debemos estar fuertes para atender al bebé.

Existen dos momentos diferenciados después del parto, para los que debemos saber cuidarnos:


Consejos para las primeras horas tras el parto


Acaba de atravesar el alumbramiento y la mamá ya debe estar preparada para alimentar y atender a su bebé que la demanda continuamente.

En estos momentos es importante:

– Levantarse y comenzar a caminar lentamente, prestando atención al propio cuerpo que todavía está muy débil tras el parto, podemos sentir mareos o incluso sufrir alguna caída.

– Descansar todo lo posible, aprovechando las horas de sueño del bebé y solicitando ayuda a nuestra pareja o familiares

– Solicitar analgésicos en el hospital, si tenemos demasiadas molestias tras el parto o sufrimos demasiado con los entuertos (contracciones posparto)

– Ducharnos y asearnos cuando estemos preparadas físicamente, siempre con ayuda de algún familiar.


La recuperación posparto en casa


Llegada a casa la recién mamá, se encuentra con muchas otras situaciones que pueden ser fuente de estrés y un obstáculo en su recuperación: las tareas de casa y otras obligaciones del día a día. Además, nuestro el estado emocional comienza a mostrar fluctuaciones debido a los cambios hormonales y el bebé, que aún se está adaptando al mundo, aumentará las exigencias de atención. ¿Cómo cuidarse con todos estos factores presentes?

– Delegar y pedir ayuda

La herramienta básica para una recién mamá en este periodo de recuperación es saber delegar y pedir ayuda. Podemos recurrir a familiares o incluso a hijos más mayores para realizar las tareas de la casa, comprar u otras obligaciones, y de esta forma poder apoyarnos en la pareja exclusivamente para el cuidado del bebé y disponer así de mayor tiempo para descansar.

– Organizarse

La sensación de desorganización puede generar aún más ansiedad a la recién mamá, por ello, se recomienda estructurar el día y las personas en las que va a apoyarse en estas primeras semanas. También conviene organizar el propio tiempo, dejando espacios para descansar, y salir a pasear con el bebé, una actividad muy importante de cara a la recuperación.

– Mantener una buena higiene y cuidado de la episiotomía o cicatriz de la cesárea

Diariamente debemos limpiar y curar los puntos de las cicatrices, evitando el riesgo de infección.

– Alimentación sana y equilibrada

La dieta debe ser variada y suficiente para mantenernos fuertes en este periodo. No es momento de pensar en dietas de adelgazamiento o deporte intenso, sino de obtener todos los nutrientes necesarios para la mamá y la alimentación del bebé.

– Expresar nuestras emociones y aceptar el momento

Los cambios hormonales intensifican las emociones de la mamá en este periodo, es importante expresarse con la pareja u otros familiares y dar salida a los sentimientos que vayan surgiendo. Además, es fundamental, saber aceptar el momento que se atraviesa y tener paciencia con todas aquellas cosas que no se pueden atender como gustaría, la prioridad debe ser el bebé y la propia recuperación.