Para entender por qué las embarazadas tienen dificultades a la hora de tomar aire durante el último trimestre de embarazo hay que conocer los cambios que sufre su organismo para dar cabida al nuevo ser humano. Es normal que, al igual que no puede correr una maratón estando de ocho meses, tampoco pueda tomar aire y notar como este le llega hasta el fondo de los pulmones, entre otras cosas porque una parte importante de su cuerpo está temporalmente ocupado.
¿Qué sucede en el cuerpo de la gestante para que en la fase final del embarazo sea tan difícil sentir como el aire llena los pulmones? La respuesta es sencilla, a lo largo de los meses el útero ha ido aumentando su tamaño a la vez que crecía el bebé, para dar cabida a esta nueva vida el resto de órganos del cuerpo deben desplazarse para dejar sitio al recién llegado.
Una de las partes que más afectadas se ven es aparato respiratorio, el útero en crecimiento presiona los pulmones hacia arriba elevando el diafragma hasta en cuatro centímetros.
En los últimos meses el volumen de aire en los pulmones disminuye casi un 20%
Como consecuencia de esta presión y elevación, el volumen de aire que hay en los pulmones se reduce hasta en un 18%. Pero pese a esta reducción de la capacidad pulmonar, el hecho es que durante el embarazo las necesidades de oxígeno aumentan para responder a las necesidades del bebé, es por ello que se produce también un aumento en la capacidad de aire que se inhala y se exhala en cada respiración, hay también un aumento de la caja torácica y el diafragma, el músculo que hay debajo de los pulmones y que se utiliza para respirar, se eleva según avanza el embarazo. Todos esos factores juntos contribuyen a que muchas embarazadas sientan que les falta el aire y que tengan dificultades para realizar respiraciones profundas en los últimos meses de gestación. Si a esto le unimos el hecho de que la congestión nasal es otra de las peculiaridades de este momento, ya tenemos el cuadro completo que nos lleva a comprender el porqué de estas complicaciones respiratorias.
Trucos o tips para disminuir la dificultad al respirar
Para minimizar todos estos efectos físicos se pueden tomar una serie de medidas. A la hora de descansar es bueno hacerlo en posición semi sentada, utilizando almohadas en la nuca, la cintura o la espalda para estar cómodas y mejorar la respiración. Es recomendable también no acostarse nada más cenar así como dar un pequeño paseo para evitar molestias nocturnas.
Puede ser muy útil para la embaraza acudir a las clases de preparación al parto, en ellas se trabaja mucho con la respiración lo que ayudará a la mujer a controlar sus ritmos respiratorios y ejercitar esas respiraciones profundas que cuestan más pero que bien realizadas tienen un efecto relajante.
Pese a todo, la embarazada debe saber que una vez se acerque el momento del parto se producirá una gran mejoría en lo que al sistema respiratorio se refiere. Una vez el bebé comience su camino hacia la salida y se encaje en la pelvis se liberará toda la zona superior y notará como respira mucho mejor.
