Infertilidad: ¿en qué consiste el estudio básico de la pareja?

El estudio básico de la pareja consiste en una serie de exámenes médicos a los que se somete tanto al hombre como a la mujer de los que se sospecha que pueden ser estériles.

Cuando una pareja lleva tiempo intentando un embarazo que no consigue, acaba por decidirse a pedir la ayuda de un profesional.

El médico, antes de proceder a un diagnóstico, empezará por pedir que se lleve a cabo un estudio básico de la pareja.

El estudio básico de la pareja consiste en hacer una serie de pruebas a los dos miembros de la pareja, para determinar su esterilidad. En el caso del hombre, se le realiza un espermograma, mientras que para la mujer las pruebas son más amplias: análisis hormonales, una histerosalpingografía, y la evaluación de la cavidad uterina y de las trompas de Falopio.

Si ninguna de estas pruebas de un resultado que permita aclarar un diagnóstico de esterilidad, se procede a un test para analizar la compatibilidad entre el moco cervical de la mujer y el semen masculino.


El espermograma


Aunque aun está muy arraigada la creencia de que las mujeres son las principales responsables de que una pareja no pueda tener hijos, la verdad es que en un 40% de las parejas, el hombre es el estéril.

Por eso, se analiza el semen del varón. Con un espermograma se puede saber si las características de los espermatozoides hacen posible que se lleve a cabo la fecundación.


Las pruebas de infertilidad femenina


En el estudio básico de pareja también se analiza si una mujer es infértil, a través de la realización de ciertas pruebas.

La primera de ellas es un análisis de sangre en el que se miden sus niveles hormonales, esencialmente de testosterona y andrógenos. También se acostumbra a buscar las hormonas tiroideas, entre otras posibles causas de infertilidad.

La histerosalpingografía estudia el útero y las trompas de Falopio, especialmente su permeabilidad. El objetivo principal de realizarla es comprobar que las trompas no están obstruidas, y que el útero no tiene ninguna malformación que evite la implantación del óvulo fecundado.

Igualmente, se recomienda la realización de una biopsia de endometrio, para confirmar que está bien preparado para alojar el óvulo fecundado, y que se produce la ovulación correctamente.


Conclusiones del estudio básico de la pareja


Las pruebas que forman parte del estudio básico de la infertilidad de una pareja dan unos resultados que permiten orientar al médico, y a la propia pareja, acerca de cual es el problema que les impide concebir.

De todos modos, los resultados del estudio básico no tienen porque ser definitivos, ya que pueden ser necesarias otras pruebas para acabar de perfilar algún diagnóstico o, simplemente, buscar otras explicaciones a porque no se produce un embarazo.

En todo caso, si el resultado final es realmente negativo, el médico recomendará a la pareja recurrir a técnicas de reproducción asistida que ayuden a conseguir un embarazo.