Consejos para la prevención de los piojos de los niños

Cuando hacen acto de presencia en casa provocan una de las situaciones más molestas para toda la familia, los piojos son pesados y difíciles de eliminar, precisamente porque son sumamente contagiosos. Por eso, en cuánto salta la alarma, normalmente desde el colegio, los padres se ponen manos a la obra para evitar que estos bichitos lleguen a la cabeza de los niños.

Es en los centros escolares donde los piojos hacen su agosto, pero la ventaja es que estando atentos se pueden detectar las primeras señales y actuar antes de que sea tarde.

Los piojos se manifiestan primero en forma de liendres, esto es, unos huevos que al cabo de una semana eclosionarán y entonces será más complicado hacerlos desaparecer.


Ante la primera alerta habrá que empezar a revisar la cabeza de los niños diariamente


De lo que se trata entonces es de revisar la cabeza de los niños muy a menudo, esto es bueno hacerlo siempre, pero más aún si desde el colegio ya nos han advertido de algún caso. No vamos a notar ninguna señal en el niño ya que las liendres no pican por lo que el examen visual será el único modo de detectarlo a tiempo.

Las liendres requieren a su vez un proceso de eliminación distinto al de los piojos, están fuertemente pegadas al cabello por lo que la única forma de eliminarlas es utilizando una lendrera o peine de púas finas. Podemos utilizar algún producto para ablandarlas, la solución casera emplea vinagre disuelto con agua, que además dejará el cabello brillante. Con paciencia iremos retirando los huevos. Este trabajo se deberá llevar a cabo de forma constante durante al menos dos semanas, hasta que veamos que los huevos han desaparecido y no se han vuelto a reproducir.

Para evitar que vuelvan a anidar en el cabello de los niños lo mejor es aplicar cada día un repelente de piojos, hay de muchos tipos, aunque también existen remedios naturales que han demostrado ser eficaces para evitar el contagio. Es el caso del aceite del árbol del te, con aplicar un poco en el champú que se usa a diario será suficiente para mantenerlos a raya, también se puede emplear una vez los piojos han aparecido.


Los piojos se previenen, entre otras cosas, siguiendo unas adecuadas normas básicas de higiene


La prevención de piojos implica también seguir una serie de normas básicas de higiene, hay que decir a los niños que no deben compartir gorros, gomas del pelo, cepillos o peines, los piojos son muy contagiosos, por lo que evitando el contacto directo con las cabezas de los compañeros se tiene mucho ganado. También es bueno que el pelo se lleve recogido, los piojos acuden con más facilidad a los cabellos sueltos.

Si pese a todo los piojos llegan a la cabeza de nuestros hijos habrá que seguir el tratamiento prescrito, es bueno que se aplique a toda la familia a fin de evitar que la plaga se descontrole, también habrá que extremar las precauciones con cojines, sofás y demás elementos que puedan servir como vía de contagio. El tratamiento se deberá llevar a cabo hasta el final, aunque parezca que ya no haya piojos y mantener después un seguimiento.