Los niños deben recoger sus juguetes cuando terminen de jugar

No cuesta nada desplegar los juguetes por toda la habitación, incluso por toda la casa, la dolorosa llega cuando se trata de recogerlos. Comienza ahí una lucha constante entre padres e hijos para lograr que recojan todos sus juguetes.

Recoger los juguetes es una tarea ingrata para los pequeños, guardar en sus cajas cada objeto es lo mismo que renunciar a esos mundos imaginarios, a esas historias que han estado un buen rato elaborando, se desmonta la fantasía y se vuelve a la realidad.

Por eso los padres tienen que ayudar a sus hijos a que esta tarea sea lo menos desagradable posible y lo primero es hacerles entender la importancia de recoger.


Hay que educar al niño haciéndole ver que el orden tiene ventajas


Podemos hacer la prueba un día, dejemos todos sus juguetes por en medio, incluso más desordenados si cabe, lo más seguro es que al día siguiente cuando el niño vea su cuarto patas arriba no se lleve una gran impresión, más todavía si se pasa un buen rato buscando sus juguetes preferidos. Es el momento de que vean lo fácil que es encontrarlo todo cuando está cada cosa en su lugar.

Para ello es necesario que la habitación infantil cuente con el espacio suficiente para dar cabida a todos sus juguetes y además de una forma accesible. No servirá de nada pedirles que se hagan responsables y recojan si tienen que recurrir a nosotros porque no llegan a los cajones o cajas. Es bueno también implicarles en el proceso. Podemos hablar de donde quieren guardar cada cosa, coches, pelotas, muñecos… de esta forma les será mucho más sencillo guardar y también encontrar sus juguetes.

Mantener el orden no es el único motivo por el que es necesario recoger. Es una tarea con la que el niño empieza a comprender que en casa tiene una serie de responsabilidades y obligaciones y que es él el que debe hacerse cargo de sus juegos y juguetes. Aprender a ser responsable le va a ser muy útil para emprender con éxito todo el resto de tareas que tenga que afrontar, por ejemplo en la escuela.


Lo mejor es adaptar el recoger juguetes como rutina desde pequeños


Y para que la operación de recoger acabe bien interiorizada, lo mejor es empezar desde que son muy pequeños. Al principio se puede plantear como un juego, igual que se sacan las piezas de una caja, se vuelven a meter, seguro que les divierte igual si les ayudamos a ello. Según crezcan habrá que mantenerse firmes, podemos pedirles que antes de darles otro juego o comenzar una nueva actividad guarden aquello que ya no van a usar. Del mismo modo es útil que sepan el tiempo que tienen para ello, si les avisamos que tienen que recoger justo antes del baño o de la cena seguramente no estén listos y comience la discusión. Podemos comentarles que les quedan 10 o 15 minutos de juego antes de recoger, por ejemplo.

Si les enseñamos la importancia del orden y de hacerse responsables de sus cosas acabarán valorando el hecho de tener todo en su sitio y se convertirá en una costumbre que mantendrán el resto de su vida.