Pautas para evitar el contagio de piojos en casa

Cualquier padre con niños en edad escolar sabe lo que es el riesgo de los piojos, llega un aviso de que en el cole hay piojos y se desatan todas las alarmas. Estos parásitos afectan a la cabeza de las personas, especialmente de los niños, se contagian muy rápidamente de unos a otros y pueden atacar a cualquier niño, independientemente de su nivel socioeconómico o de su higiene.

Cuando un niño llega diciendo que en su clase hay piojos hay tomar precauciones de inmediato para evitar que esos pequeños bichos lleguen a nuestras cabezas.

Lo primero es revisar a nuestro hijo para ver si está afectado. Los piojos se manifiestan primero en forma de liendres que son pequeños huevos de forma ovalada y color blanco o amarillento, tardan de cinco a seis días en eclosionar por eso es importante repasar bien todo el cuero cabelludo y eliminar estos huevos. Esto se puede hacer con el pelo húmedo y un peine de púas finas, hay que repasar tramo a tramo y quitar cada una de estas liendres.


Es importante  que sea el pediatra el que nos indique el tratamiento adecuado


La visita al pediatra para que nos indique el tratamiento adecuado es también necesaria a fin de evitar que se reproduzcan, en este caso hay que seguir muy bien los pasos ya que si no se realiza de forma adecuada sirve de muy poco. Repasar el cabello cada pocos días es fundamental para ver si el problema ha desaparecido.

Puede que nuestro hijo no tenga todavía liendres ni piojos, en este caso lo mejor, además de la revisión, es aplicar un tratamiento preventivo, no es necesario que se trate de un agresivo champú, de hecho en el caso de los niños pequeños está desaconsejado. Hay productos naturales que sirven para prevenir los piojos sin ningún riesgo. Uno de los más valorados es el aceite de árbol del té, solo deberemos aplicar unas gotas en el cuero cabelludo después de lavar el pelo con el champú habitual.

Hay que indicarle también al niño que evite estar en contacto directo con las cabezas del resto de niños y no compartir gorros, peines o demás objetos que puedan transportar piojos. En casa deberemos mantener también una buena higiene lavando a menudo las prendas que estén en contacto con el cabello.


Hay que lavar sábanas, cojines, peluches y todos los textiles propensos a albergar piojos


En general es recomendable hacer una limpieza a fondo a altas temperaturas especialmente de textiles como cojines, mantas, peluches y todo aquello que puede ser propenso a albergar piojos.

En ocasiones si la crisis es grave puede que sea mejor mantener al niño fuera del colegio durante unos días para evitar tanto que le contagien como que contagie. El problema de los piojos seguramente aparezca varias veces a lo largo de la vida escolar, especialmente en otoño, sabiéndolo de antemano los padres pueden tomar medidas preventivas y no olvidarse de repasar al menos todas las semanas las cabezas de sus hijos. En caso de detectar piojos habrá que dar aviso de inmediato al centro escolar para evitar que el problema se propague.