Tartamudez infantil en niños

Cuando los niños empiezan a chapurrear sus primeras palabras resultan muy simpáticos, se esfuerzan por pronunciar correctamente y nos hace mucha gracia ver como repiten varias veces una palabra, una sílaba o incluso como dicen ‘pónelo’ o ‘rompido’ en lugar de ponlo y roto. Son fases de adquisición del lenguaje y el vocabulario normales en todos los niños.

Pero es importante estar atentos, ya que si repite una sílaba muchas veces antes de decir la palabra o si se bloquea en su discurso puede que ya no sea algo normal y estemos ante un caso de tartamudez infantil.

Este es un trastorno en la fluidez del habla e implica que el niño no es capaz de expresarse según corresponde a su edad y desarrollo. Entre los dos y los cuatro años el niño empieza a expresarse, en este momento está desarrollando los músculos que le permiten hablar y todavía se siente inseguro a la hora de pronunciar, pero es cuando se detectan las primeras alteraciones del lenguaje y ante las que hay que estar atento.


Tipos de tartamudez infantil


Las más habituales son la repetición de sonidos pero también cuando hay interjecciones frecuentes, por ejemplo dice mucho eeemmm, si hay pausas en medio de una palabra o se bloquea en una frase, si se nota tensión cuando llega a determinadas palabras o cuando evita pronunciar aquello más difícil.

En un porcentaje muy alto estas dificultades iniciales van a desaparecer solas según el niño evolucione, pero hay un tanto por cien de casos en los que tartamudez se mantiene y es ahí donde hay que actuar ya que un problema de este tipo, aunque no indica ningún trastorno de tipo cognitivo, si puede afectar al niño en sus relaciones con el resto.

Lo normal es que la tartamudez no se manifieste siempre, hay situaciones más propensas, según de qué se esté hablando, con quien y como el niño tartamudeará o no. La parte emocional es muy importante, hay niños que no tienen ningún problema leyendo solos en casa pero en clase se ponen nerviosos y tartamudean, por eso es muy importante ofrecer al niño la seguridad que necesita y ante todo tener paciencia.


¿Cómo hay que tratar al niño tartamudo?


Con el niño tartamudo lo primero será restar importancia al problema, no hacérselo notar, hay que dejarle acabar las frases a su ritmo y no remarcar cada vez el error ya que esto solo hace que sea más consciente de su fallo y lo repita. Es bueno hacerle preguntas sencillas que le ayuden a expresarse en un ambiente relajado y dedicar tiempo al día para hablar con él. También debemos recordarle la importancia de hablar de forma pausada intentando controlar sus nervios. Si queremos ayudarle no debemos presionarle ni tener un nivel de exigencia demasiado alto, esto hará que esté más relajado y por tanto se exprese mejor. Otra pauta básica será ofrecer confianza, si el niño se siente seguro de si mismo reaccionará mucho mejor ante los fallos que pueda cometer y si él no le da importancia tampoco lo hará el resto.