El estreñimiento en los bebés

El estreñimiento es una de las dolencias más habituales en los bebés, se produce debido al endurecimiento de las heces. Normalmente estas se acumulan en el último tramo del colon y si son blandas y normales se evacuarán sin problemas, el problema es que si son duras y compactas su evacuación provoca dolor, por lo que el organismo del niño tiende a bloquearlas, provocando el estreñimiento.

La pregunta por tanto sería ¿qué es lo que provoca este endurecimiento? La respuesta está en la alimentación.

Mientras el bebé se alimenta del pecho de su madre no suele haber problemas de estreñimiento. La composición de la leche, rica en lactosa, hace que las heces se expulsen con facilidad, pero cuando se cambia a la leche artificial o se introduce la alimentación complementaria es normal que las heces se endurezcan.


La alimentación es el principal causante del estreñimiento en bebés


En principio este es un problema que tiene fácil solución se trata de introducir alimentos ricos en fibra que faciliten su tránsito intestinal. Otras soluciones útiles son los baños con agua templada y sobretodo los masajes, con ellos facilitamos la movilidad favoreciendo la expulsión de las heces. Los masajes se deben practicar a una hora en que el bebé esté calmado y cuando la digestión haya finalizado, se suelen aplicar movimientos circulares siguiendo el sentido de las agujas del reloj. Otros remedios pasan por los supositorios de glicerina o algunos laxantes, no son muy recomendados ya que el organismo del bebé no se acostumbra a trabajar por si mismo. Tampoco se recomiendan otras técnicas caseras como introducir la punta del termómetro por el ano del bebé, se pueden causar lesiones.

Si el niño no toma pecho es fácil que se estriña debido al tipo de leche que tome, pero además hay que tener en cuenta que los movimientos intestinales del recién nacido todavía no están del todo maduros y es normal que en ese proceso de ajuste haya problemas de estreñimiento. Lo normal es que el bebé menor de dos meses evacue varias veces al día, casi con cada toma, a partir de esa edad lo hará un par de veces al día.


Cada bebé es único y si detectamos cambios hay que consultar con el pediatra


De todas formas cada bebé es único y antes de considerar que esté estreñido habrá que estudiar su ritmo. Al no tomar pecho habrá que vigilar el tipo de leche que se da en caso de que presente estreñimiento, venden leches específicas para evitarlo, también se puede añadir un poco de agua extra en la preparación del biberón para facilitar la evacuación.

Es fácil observar cuando un bebé está estreñido, se pone rojo del esfuerzo, mueve las piernas y está nervioso e intranquilo, además de llorar a causa de la molestia. Es importante intervenir cuanto antes para evitar que las heces acaben endureciéndose y complicando así por tanto su expulsión. En estos momentos en que el bebé lo pasa peor, los masajes y el movimiento son el mejor aliado, a partir de ahí se deben cambiar las pautas alimenticias. De todas formas en los casos más graves siempre debe ser el pediatra el que nos de las indicaciones precisas.