Cómo celebrar el cumpleaños de tu hijo

Es uno de los días más especiales para los niños, junto con las Navidades es la fecha que esperan con más emoción. No será lo mismo celebrar una fiesta de cumpleaños para un niño de un año que para otro de diez, en la organización del evento se deberá tener en cuenta ese factor ya que en función de la edad cambiarán los tipos de fiestas posibles.


Preparativos para el cumpleaños según su edad


Si se trata de un niño de 1 o 2 años la fiesta de cumpleaños suele tener un carácter marcadamente familiar.

Muchos niños no están todavía escolarizados por lo que no hay amiguitos de clase y la celebración se limita a parientes próximos. Aunque sea pequeño y no acabe de comprender qué sucede, sí podemos hacer de este día algo especial. Si la celebración va a ser en casa podemos decorarla con globos y carteles e invitar a familia y amigos. Solo ver la casa cambiada y a un montón de gente llevándole regalos ya hará de ese día algo especial para él. Sin en la familia hay muchos niños podemos organizar la fiesta en algún local lúdico preparado para ello, el hecho de verse rodeado de muchos niños y de nuevo con regalos marcará un día diferente.

A partir de los 3 años, cuando empiezan en la escuela, las fiestas de cumpleaños se convierten en auténticos eventos sociales. Aunque siempre está la opción de celebrarlo en la intimidad, los niños de esta edad y hasta los 6 o 7 años, disfrutan siendo los protagonistas del día. Si la cantidad de niños es aceptable se puede hacer la fiesta en casa, no deben faltar los sombreritos y la decoración festiva, se puede organizar una tarde de juegos o contratar animación. Pese a todo, la mayoría de los padres opta por acudir a locales especializados. Si queremos que nuestra celebración sea diferente podemos hacer una fiesta temática, indicando a los niños que vayan disfrazados de algo concreto o apostando por su personaje favorito para que acuda al local en cuestión. Otra opción que se han puesto de moda para estas edades es hacer la fiesta en un parque, los padres llevan la merienda de casa mientras los niños juegan a su aire.


Cumpleaños a partir de los 8 años


Cuando pasamos de los 8 años los niños empiezan a verse como mayores, puede que las fiestas infantiles ya no sean tan de su agrado. Seguramente a estas edades ya tengan un grupo de amigos más cerrado, por lo que una buena opción sería acudir a la bolera, a los karts o a un parque de atracciones, se trata de hacer de este un día diferente. Podemos además implicarles en su fiesta, pueden preparar las invitaciones o elegir con nosotros el lugar donde celebrar el evento.

Una vez pasamos de los 12 años se plantea la opción de dejar que celebre la fiesta a solas, podemos dejarle ir al cine o a merendar con sus amigos. Ellos valorarán su autonomía como un regalo más.

En definitiva se trata de adaptarnos a las necesidades y características de nuestro hijo en cada momento, siempre teniendo presente que es su día y que, dentro de unos límites, debemos respetar sus deseos.