Hay cuentos que no nos ayudan a educar a los niños

Caperucita roja, El patito feo, Blancanieves o Juanito y los frijoles mágicos son algunos de los cuentos clásicos que todos conocemos. Historias que en la infancia, nos ayudan no solo a conciliar el sueño, sino a entender la vida.

Los cuentos infantiles se pueden clasificar según la temática en: cuentos de hadas, de animales, de ciencia ficción, populares, de humor, mitológicos, de leyenda…etc.

Independientemente del tipo de historia, todos narran historias ficticias en mayor o menor medida y transmiten a los niños muchas ideas a través de sus protagonistas.


Los cuentos son muy importantes ya que ayudan al niño a aprender sobre el mundo que le rodea y fomenta su imaginación


Los niños, que están en proceso de crecimiento, necesitan información para entender el mundo y saber desenvolverse en él. Los cuentos se pueden utilizar para transmitir valores y actitudes en los menores, para ellos éstos mensajes son muy creíbles ya que vienen de sus personajes favoritos.

Algunos profesionales de la educación, del cuidado de los niños o los propios padres han suscitado polémicas sobre la adecuación de los cuentos infantiles más conocidos, abriendo debate en aspectos como:

Glorificar la belleza

Se discute acerca de que cuentos como “El patito feo”, transmiten que una persona que nace diferente (fea) es discriminada y finalmente debe convertirse en bella para ser aceptada por los demás

La dependencia de las mujeres a los hombres

Ejemplos de cuentos a los que se acusa de ello son los que representan a la chica que espera la llegada de su salvador para ser feliz (Blancanieves, Cenicienta…etc)

Valores materiales

Algunas historias hablan de la consecución de la felicidad cuando se alcanza el tesoro, Hansel y Gretel por ejemplo consiguen volver con su padre cuando encuentran el oro ya que éste los había abandonado por falta de medios económicos.

Existen otro tipo de cuentos en los que el poder y la gloria se otorgan a los que consiguen el conocimiento o sabiduría, valores más sanos y productivos. Ejemplo de ello es “El rey Arturo y los caballeros de la mesa redonda” donde el héroe principal es un niño que con la ayuda de Merlín consigue ser rey a través del conocimiento.

La agresividad

Se han criticado cuentos como “Caperucita Roja” en el que el lobo se come a la abuelita y el cazador abre la panza del lobo para rescatarla. En “Juanito y los frijoles”, el niño llega a robar y matar para conseguir su propósito. En ambos se debate sobre la normalización o no de la agresividad.


Los padres deben revisar previamente los cuentos, ya que incluso los clásicos pueden tener valores que hace siglos eran válidos pero hoy en día no


Estos son sólo algunos aspectos que se han considerado susceptibles de crear una influencia negativa en el aprendizaje de valores del niño. No obstante, si los padres consideran oportuna la inclusión de títulos como estos en la lectura de sus hijos, se recomienda que dispongan de otras versiones que hablen del problema de “ser diferente”, “la consecución de la felicidad por otros medios no materiales” o “la independencia de la mujer”.

Cada familia habrá de determinar en qué medida cree que los cuentos que escogen son acordes a sus valores y revisar los contenidos atendiendo a los mensajes implícitos en la historia.

Los expertos recomiendan algunos valores necesarios para una buena educación en los niños: el respeto, la tolerancia, la amistad, la solidaridad, la responsabilidad, la perseverancia, la compasión, la sinceridad, la lealtad y el trabajo entre otros.