Menos televisión para los niños

El uso indiscriminado de la televisión a todas horas del día es uno de los temas de discusión en muchas familias, especialmente si tienen hijos. La verdad es que pasar demasiadas horas delante de la tele no es nada positivo para un niño. De hecho, hay estudios que demuestran que cuando la tele está encendida, los adultos hablan menos y, por lo tanto, los pequeños no desarrollan su lenguaje a un ritmo más rápido.

Ésta es una de las razones por las que se recomienda que los niños menores de dos años no debieran estar tanto tiempo delante de la pantalla.


El lenguaje de los niños y la televisión


Los padres deben ser conscientes de que su hijo adquiere la capacidad plena del lenguaje durante sus dos primeros años de vida, y alrededor de los tres empieza a usarlo de manera fluida. Para que este proceso se desarrolle de manera correcta, es esencial que se produzca de manera habitual conversaciones entre padres e hijos.

Por lo tanto, se necesita que los padres aprovechen sus ratos de ocio para pasar tiempo de calidad con sus hijos, evitando dejarlos ‘aparcados’ delante de la tele. Por muy sencillos que sean, todos los intentos de comunicación que haya entre padres e hijos, resultarán esenciales para ayudar a desarrollar el lenguaje de los pequeños.

En este proceso de aprendizaje, es esencial cambiar el tiempo de exposición ante la tele del niño por darle la oportunidad de conversar con los padres, siempre siguiendo su ritmo, pero con constancia.


La televisión también influye en la personalidad de los niños


Los más pequeños ven el mundo que les rodea a través de los ojos de lo que les enseña la televisión. Hay que tener en cuenta que, para ellos, la pequeña pantalla es algo normal desde que nacen, con lo que su influjo en el pensamiento de los pequeños es enorme, dado que los niños son muy influenciables.

Por lo tanto, no solo hay que tener en cuenta el tiempo que los niños pasan delante de la tele, sino también lo que ven. Debemos ser conscientes de que toda la información que reciban pesará sobre su formación, y cambiará su manera de pensar.


¿Qué ven los niños en la tele?


Hay que tener en cuenta que los niños ven muy a menudo contenidos en la tele que no son apropiados para ellos, como violencia, sexo, publicidad y alcohol.

Los programas violentos pueden generar en los más pequeños sentimientos muy confusos, como temor o agresividad. Además, la publicidad, les insta a consumir productos que no son sanos para ellos, como golosinas o refrescos.


Consecuencias de que los niños vean demasiado la televisión


Los niños a los que no se les controla las horas que pasan ante la tele, pueden sufrir consecuencias en su desarrollo psicológico y emocional, como:

  • Ser menos creativos e imaginativos
  • Convivir menos con su familia y amigos
  • Evitar la lectura
  • Problemas de peso por la inactividad
  • Disminución del rendimiento escolar

De todos modos, debemos tener en cuenta que la televisión no es nociva en si misma. Lo que es malo para los niños es hacer un mal uso de ella, y ver programas que no son adecuados para su edad. Los padres tienen ante si la responsabilidad de enseñarles a desarrollar la capacidad de selección y de discriminación, que les capacitará para decidir ver aquello que les conviene.