Tronas – Consejos para hacer la mejor compra

Llamamos trona a la silla especialmente pensada para dar de comer a los niños. Es más alta que una silla normal y permite que el niño tenga su propio espacio para poco a poco ir aprendiendo a comer.

Existen dos clases de tronas, las normales o de uso en casa y las transportables. Dentro de cada clase podemos encontrar varios tipos:

– Tronas normales: tenemos dos tipos: las fijas, que son las “de toda la vida" que constan de un solo cuerpo y suelen ser plegables y las convertibles, las cuales podemos ir cambiando su forma y disposición según va creciendo en bebé hasta que cumple varios años de edad e incluso algunas se convierten al final en una silla normal y corriente.

– Tronas transportables: tenemos dos tipos también: las que se sitúan encima de una silla normal y las que se cogen directamente a la mesa.

Las más útiles son las que se sitúan encima de una silla normal ya que las que se acoplan a una mesa muchas veces no se pueden acoplar (dependen mucho de la forma y tamaño de la mesa).

Respecto a los materiales de uso encontramos que tronas hechas de casi cualquier material: plástico, madera, aluminio… Aquí debemos valorar tanto que el material quede ajustado a la decoración que tengamos como su facilidad de limpieza. Usualmente las de madera son las más bonitas pero las de plástico las más prácticas para su limpieza. Al principio solemos valorar más el aspecto visual y el cómo quedará con la decoración, pero siempre (o al menos casi siempre) lo más práctico será adquirir una de plástico y con fundas lavables.


Edad de uso de la trona


La edad de uso de la trona dependerá del tipo elegido. Normalmente desde que el niño se tiene sentado hasta que tiene unos 3 ó 4 años podemos usar la trona.

Sin embargo las tronas transportables tienen más restricciones, sobre todo las que se acoplan a la mesa. Estas tronas suelen tener restricciones de peso que superaremos rápidamente.

Podemos encontrar tronas muy baratas y útiles desde pocos euros. Por unos 40 euros podemos tener tronas de plástico, e incluso desde 20 euros podemos tener tronas transportables útiles para cuándo comemos fuera de casa.

Si tenemos dinero y nos encanta el diseño de moda podemos encontrar tronas de hasta 500 euros.

Como vemos el rango de precios es muy amplio, pero no olvides siempre buscar la practicidad, comodidad y limpieza de la trona.


Recomendaciones


Hay que verificar que los materiales de la trona sean resistentes, que no contengan elementos puntiagudos y que tenga sistemas de seguridad y fijación del niño. También hay que verificar que no contenga material o pintura tóxica.

Otro punto al que hay que prestar especial atención es que la trona no sea fácilmente plegable o al menos cuente con un dispositivo de seguridad para evitar que cuándo el niño crezca un poco intente plegar el sólo la trona y se pille los deditos con el mecanismo.

También es muy valorable el que dispongamos de más de un trona, por ejemplo otra en casa de los abuelos si vamos mucho allí. Por ello es un recomendable que busquemos tronas no muy caras ya que deberemos tener varias al final aunque sea por comodidad.