Urticaria infantil en bebés y niños

Las manchas rojas que aparecen en la piel de un niño, acompañadas en muchas ocasiones de picor, se conocen como urticaria, aunque no hay que tener presente que, en algunos casos, este trastorno se puede manifestar con unas ronchas blancas, rodeadas de una inflamación roja.

La urticaria aparece en cualquier parte del cuerpo de un niño de una manera curiosa: el pequeño nota sus síntomas durante unas horas, después de le desaparecen y, entre uno o tres días después, le reaparecen.

El aspecto característico de sus lesiones hace que sea fácil detectar que un niño tiene urticaria, pero el problema más frecuente en estos casos es averiguar de donde procede el problema, ya que puede ser una reacción a numerosas causas.


Qué puede provocar la urticaria en niños y bebés


Saber qué es lo que provoca un brote de urticaria en un niño es la ideal para conseguir establecer un tratamiento y una prevención correctos, pero es algo realmente complicado, dado la infinidad de factores que pueden originarla.

Algunas de ellas son:

  • El roce de la piel en contacto con cualquier objeto que pueda provocar alergia al niño
  • La exposición a algo demasiado fuerte para los sentidos infantiles. Por ejemplo, comida demasiado picante, un lugar donde haya un calor excesivo o, incluso, una emoción.
  • Algunos alimentos y aditivos también pueden provocar urticaria, como la leche, las nueces o los huevos, entre otros muchos.
  • La penicilina, el ácido acetilsalicílico y algunos antiinflamatorios también pueden favorecer la aparición de urticaria
  • La urticaria también puede ser un síntoma de algunas infecciones víricas y bacterianas.
  • Finalmente hay que señalar que existen urticarias de origen hereditario, y otras que se especula con que pueden venir provocadas por que el niño padezca estrés, o sea vea afectado por alguna gran emoción.


El tratamiento de la urticaria


Lo más habitual es que la urticaria se vaya sin que aplique ningún tratamiento, pero si los brotes se repiten con frecuencia es importante consultar con el médico, aunque lo único que podrá hacer es administrar una medicación al niño que le ayude a reducir la duración de los síntomas. Es importante saber que en estos casos las cremas antivirales no son efectivas, y los antibióticos solo se recomiendan en casos muy específicos.

En todo caso, siempre se debe acudir a urgencias si el niño que padece urticaria tiene problemas para respirar y tragar. Igualmente, es necesario consultar con el pediatra si sucede alguna de las siguientes situaciones:

  • El brote de urticaria aparece como reacción alérgica inmediata
  • El niño tiene fiebre
  • Se le hinchan las extremidades

Naturalmente, los casos de urticaria habituales – y a los que no se encuentre justificación- , y los que los padres ven que se alargan demasiado en el tiempo, también deben pasar por la consulta de un pediatra, para que éste pueda valorar si pueden obedecer a alguna causa médica que no sea posible apreciar a simple vista por parte de los padres.