Cuidados de la piel del recién nacido

Desde el momento en que el bebé sale del vientre de su madre está expuesto a una serie de factores desconocidos para él. Desde el aire, hasta el contacto físico, pasando por la sensación de ropa en su piel. Es precisamente a través de la piel por donde recibirá gran parte de los estímulos, recordemos que se trata del mayor órgano del cuerpo humano y a falta de una vista totalmente desarrollada, este será el transmisor de las primeras sensaciones al recién nacido.

Las diferencias entre la piel del recién llegado al mundo y la de los adultos son varias.

En primer lugar es la mitad de gruesa con lo que es mucho más permeable a sustancias como pomadas, cremas, medicamentos… Es por ello que hay que extremar las precauciones con lo que se extiende sobre la piel del bebé. Deben ser siempre productos adecuados y que respeten las características de esta piel recién estrenada. El hecho de ser más delgada favorece a su vez que el agua y el calor escapen más fácilmente del cuerpo del bebé.


Las primeras semanas tienen una piel muy delicada


El tener una piel tan delicada hace que estén más expuestos a infecciones. Las glándulas sebáceas no están totalmente desarrolladas ni tampoco el sistema inmune por lo que es fácil que contraían enfermedades de la piel si no se tiene cuidado.

Tampoco será igual la piel del bebé de un día con la que muestre tras varias semanas. Nada más nacer, la piel del bebé aparece cubierta por una especie de capa de grasa que le sirve como protector dentro del vientre de la madre. Suelen presentar además un color violáceo en el momento de nacer, una vez los pulmones comienzan a funcionar pasará a un tono rojizo. Tras las primeras 24 horas la piel del 70 por cien de los bebés pasa del enrojecimiento a un tono amarillento, es la ictericia del recién nacido que se pasa en unos días. El sol en su justa medida será el mejor aliado para que el bebé vaya adoptando un tono de piel natural. En estos primeros días será habitual además una ligera descamación.


Higiene, jabones neutros y lociones para la piel


Las medidas que se deben tomar para proteger tan delicado órgano en estas primeras semanas, pasan por el baño diario y el uso de jabones adecuados, hipoalergénicos y exentos de perfumes. El secado será también muy importante, si la piel queda húmeda se pueden producir dermatitis. Es habitual la dermatitis del pañal provocada en parte por que los diferentes pliegues de la piel no han quedado totalmente secos antes de colocar el pañal. Los pañales serán otro punto a considerar, si le provocan rozaduras o enrojecimientos puede que haya que probar varias marcas hasta encontrar la adecuada.

Las leches corporales o aceites en estos primeros días deben estar recomendados por el pediatra. En principio el bebé no los necesita, pero si se detecta que la piel está muy seca será el médico el que nos indique cual es el producto adecuado.

En la piel de bebé pueden aparecer erupciones de diversos tipos, desde manchas rojas, hasta granitos similares al acné. En la mayoría de los casos son normales y desaparecen por si solas. De todas formas, ante cualquier cambio en el bebé lo mejor es salir de dudas consultando al especialista.