Llega un momento en la vida de los bebés en la que se dan cuenta de que a través de la boca pueden descubrir nuevos aspectos de aquello que tienen en la mano. La boca tiene más terminaciones nerviosas de las que se pueden encontrar en cualquier otra parte del cuerpo, por eso el bebé investigará con su boca si lo que tienen en la mano es duro, blando, dulce, salado o áspero.
Los bebés van adquiriendo poco a poco el control de su cuerpo y de todos sus sentidos, a falta de una buena manipulación táctil o de una vista bien desarrollada, la boca es lo que tienen más a mano para descubrir como es aquello que les rodea.
No olvidemos que es la primer parte del cuerpo que controlan bien gracias al reflejo de succión, por eso es el primer lugar al que acuden.