Se puede realizar un tatuaje en el embarazo, pero dado que es una práctica que no está exenta de riesgos puede que la embarazada prefiera dejarlo para después del parto.
No se ha demostrado que las tinturas y demás productos que se utilizan en las salas de tatuaje sean perjudiciales para la embaraza o el feto, no hay contraindicaciones para el resto de personas, pero ante esta duda lo mejor es esperar al menos hasta que hayan pasado los tres primeros meses.
Durante los primeros tres meses conviene no realizarse ningún tatuaje
La cantidad de producto que absorbe el organismo es muy poca y no parece que sea suficiente para dañar al feto.
Pero los tres primeros meses son determinantes en la formación de los órganos del bebé, cualquier alteración en esta etapa puede conllevar malformaciones y otros defectos que afecten a su normal desarrollo, por eso lo mejor es no introducir sustancias en el organismo de las que no se tenga absoluta certeza.
Una vez pasada esta etapa de riesgo, la posibilidad de que el tatuaje afecte al bebé es mucho menor por lo que la mujer podría realizarlo con mayor tranquilidad. Aun así debe observar una serie de precauciones ya que los riesgos no están solo relacionados con las pinturas que se utilizan para el dibujo.
Los tatuajes se realizan con agujas y este es uno de los medios más habituales para contraer enfermedades como el VIH o la hepatitis. Las agujas sucias son portadoras de estos virus que se transmiten a la madre y al bebé con graves consecuencias. Por eso a la hora de realizar un tatuaje hay que comprobar muy bien el lugar al que se acude.
El local debe tener todos los permisos en regla y ser de total confianza, así mismo el tatuador debe estar correctamente registrado y seguir las pautas de seguridad. Las más importantes serían utilizar guantes, abrir una aguja nueva en cada trabajo y que las pinturas y demás utensilios también sean estériles. Para asegurar la esterilización de los instrumentos que intervienen en el proceso el salón debe de estar dotado con una máquina llamada autoclave.
Hay que avisar al tatuador de que se está embarazada
Es importante también que el artista tatuador sea una persona de confianza, en el caso de que surja algún problema con el tatuaje se le debe poder localizar sin problemas, también por si es necesario hacerle alguna consulta. Antes de realizarse el tatuaje la mujer debe avisar de su estado por si es necesario tomar alguna precaución extra.
Otra de las cuestiones a tener en cuenta es la zona en la que va a hacerse el tatuaje, si se realiza en la parte baja de la espalda habrá que pensar en la epidural. La mayoría de centros hospitalarios no tienen reparos en poner la inyección pese a que haya un tatuaje en la zona, pero si este es demasiado reciente puede que no lo hagan, así que lo mejor será consultar el protocolo de actuación del centro al que se vaya a acudir. También hay que pensar que si se realiza en una zona donde la piel se va a estirar puede que el resultado no sea el esperado.
Para evitar complicaciones y asegurar que el tatuaje quede perfecto lo mejor será esperar a que haya pasado el parto.