Gripe en bebés y niños

Con la llegada del frío hace su aparición la temida gripe y sus molestos síntomas: fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, debilidad, tos estornudos… Si todo esto resulta pesado para un adulto más todavía para un niño y sobretodo para un bebé que además ni puede expresar sus molestias ni entiende ese malestar general.

A partir de otoño se inicia la campaña de la gripe y por tanto llega el momento de extremar las precauciones, lo primero va a ser precisamente la prevención.

Hay que procurar que los niños pequeños no estén expuestos a grandes cambios de temperatura, en casa hay que mantener un ambiente agradable, sin exceso de calor y hay que vigilar también la alimentación introduciendo muchos líquidos y productos ricos en vitamina C.


La gripe es una enfermedad muy contagiosa


Pese a todo la gripe es una enfermedad muy contagiosa y seguramente no resulte difícil que nuestro hijo acabe enfermando. Si este es el caso habrá que estar muy atento a los síntomas iniciales con tal de iniciar el tratamiento cuanto antes y evitar que la dolencia se agrave. La gripe se puede confundir fácilmente con un resfriado ya que ambos presentan los mismos síntomas iniciales como son tos, estornudos, congestión nasal y dolor de cabeza. La gripe se incuba durante tres o cuatro días y suele durar en torno a una semana, cuenta también con otros síntomas propios como la fiebre, los dolores musculares o el cansancio que impide al niño realizar su actividad de forma normal.

No existe un fármaco mágico que cure la gripe, lo único que se puede hacer es tratar los síntomas para minimizar su incidencia. En el caso de los bebés el pediatra nos puede indicar que se puede tomar en el caso de que la congestión nasal impida respirar adecuadamente o si la fiebre se mantiene alta durante varios días. En general el tratamiento incluye descanso, en caso de ir a la guardería o al colegio es mejor permanecer en casa hasta que se esté totalmente repuesto, y la ingesta de muchos líquidos, caldos y zumos son lo mejor para la convalecencia. Durante un episodio de gripe los niños suelen perder el apetito, por eso es mejor realizar varias comidas al día pero de pocas cantidades y sin obligarle.


Vacuna contra la gripe


Respecto a la vacuna existe una gran controversia, hay quien afirma que es lo mejor para prevenir la gripe y que en caso de que esta se contagie su gravedad es mucho menor, mientras que por otro lado están los que afirman que es peor el remedio que la enfermedad ya que existe el riesgo de sufrir reacciones alérgicas, por ejemplo. Lo que hay que hacer es siempre consultar al médico y si el niño se encuentra en un grupo de riesgo es mejor vacunarlo. En general se puede vacunar al niño contra la gripe a partir de los seis meses de edad, en caso de producirse algún tipo de alergia estas suelen ser leves como dolor o enrojecimiento en la zona donde se pinchó. De todas formas la decisión de vacunar a los niños es personal de cada familia que debe optar por aquello que considere mejor para sus hijos.