El estrés del bebé en el útero materno

Cuando una mujer embarazada tiene un embarazo emocionalmente complicado, esto puede afectar negativamente al feto, haciendo que el bebé sufra de estrés.

Desde hace ya muchos años, todo el mundo está consciente de que el estrés no es algo bueno para la salud de ninguna persona. Pero estudios de las últimas décadas revelan que si una mujer sufre de problemas emocionales o se encuentra bajo mucha presión durante su embarazo, el resultado puede ser que el bebé sufra de estrés dentro del útero, lo cual puede traerle diferentes consecuencias tanto antes, como después del parto.


Consecuencias a largo plazo


Los estudios muestran que el resultado más común visto en niños o adolescentes cuyas madres sufrieron del estrés durante el embarazo, es la incapacidad emocional para lidiar con el mismo cuando crecen.

Por eso es importante comprender y aprender a reducir las presiones externas durante el embarazo, para así evitar que el bebé sufra de estrés y, posteriormente, su calidad de vida no se vea disminuida.

Antes que nada, veamos cuáles son otros de los efectos que el estrés de la embarazada puede tener sobre el feto; Entre ellos se encuentran un bajo desarrollo neurológico (sobre todo en las primeras semanas del embarazo, lo cual puede causar problemas intelectuales y del lenguaje futuros en el niño), una importante disminución del peso del bebé (principalmente en el primer trimestre, teniendo como consecuencia problemas de desnutrición en el niño), e incluso puede llegar a producir un aborto espontáneo, si no se toman las precauciones necesarias para evitar que el bebé sufra de estrés dentro del útero materno.

Por lo tanto, teniendo en cuenta las peligrosas consecuencias que el estrés de la madre puede causar sobre el feto, es importante que la embarazada aprenda a lidiar con los problemas diarios, emocionales e incluso problemas serios que pueden presentarse durante el transcurso del embarazo. Lo ideal para prevenir que el bebé sufra de estrés a causa del estrés materno, es que la mujer se encuentre en un ambiente lo más armónico y calmo posible. Incluso en momentos difíciles que pueden presentarse a lo largo de los 9 meses de gestación, es importante que el padre, la familia cercana y amigos hagan lo posible para que se sienta más cómoda y a gusto, evitando las situaciones de estrés, ya sean laborales, personales o emocionales.


Evitar el estrés estando embarazada


Tener un sistema de apoyo, ya sea familiar o de asistencia terapéutica, es la clave para que la futura madre se sienta emocionalmente estable y para impedir que el bebé sufra de estrés durante el embarazo. Por eso, todos los esfuerzos deben dedicarse a crear un entorno calmo y, en caso de que sea necesario, recurrir a un terapeuta para aprender a lidiar con los inevitables problemas que se presentarán eventualmente, y que no está en manos de nadie poder evitar. Además, ciertas actividades que pueden realizarse en el hogar, como el uso de la aromaterapia, cromoterapia y musicoterapia (entre otras) pueden ayudar en gran medida a crear el ambiente sano y harmónico necesario tanto para la madre, como para el bebé dentro del útero.