Alimentación en el embarazo múltiple

Cuando se recibe la noticia de estar esperando un parto múltiple, algunas veces se siente a la vez emoción y un cuadro de shock al saber que se van a tener varios bebés.

Una de las cosas más importantes es conocer los cuidados especiales y sobre todo la buena nutrición que debe tener la madre ya que se sabe que los embarazos múltiples están asociados con un mayor riesgo de bajo peso al nacer debido a la prematuridad y retardo del crecimiento.

La buena noticia es que hay cada vez más pruebas de que la buena nutrición materna en los embarazos múltiples se relaciona con mejores resultados.

Los bebés que están bien alimentados tienen mayor peso al nacer y son menos propensos a nacer prematuramente.

Cuando se está embarazada de gemelos o trillizos, no se debe comer por tres o por cuatro, en realidad, son necesarias 300 calorías más por cada niño que deben suplirse de forma sana y equilibrada.


Consejos generales sobre la alimentación en el embarazo múltiple


Energía

Las necesidades nutricionales de energía (calorías) en los embarazos múltiples se debe incrementar debido a la formación y el aumento de tamaño, de diversos órganos y tejidos como lo son la placenta, el útero, los senos, el volumen sanguíneo, y por supuesto, el desarrollo y crecimiento de los niños.

Es importante que su energía no provenga de azúcares simples, por ejemplo las que se encuentran en los dulces, galletas, confitería, y postres, porque hay un mayor riesgo de diabetes gestacional.

Conviene realizar tres comidas al día y dos o tres meriendas sustanciales (por ejemplo el desayuno, té de la mañana, almuerzo, merienda, cena, merienda antes de acostarse). Es importante contar con comidas bien espaciadas a lo largo del día para mantener a raya los niveles de azúcar en la sangre.

Proteínas

Las proteínas sirven como bloques de construcción del tejido corporal. Una deficiencia de proteína puede resultar en que se pueda afectar el tamaño de la placenta o que se puedan dar retrasos en el crecimiento. Esto lo podemos encontrar en la carne, huevos, productos lácteos o legumbres.

Grasas saturadas

Su cuerpo necesita la cantidad adecuada de grasa para mantenerse fuerte y sano. Trate de comer de dos a cuatro porciones de grasas no saturadas, que pueden incluir aceites vegetales, mayonesa light, o mantequilla de maní.

Hierro

Asegúrese de mantener sus niveles de hierro adecuado durante sus chequeos prenatales. Debido al aumento del flujo sanguíneo por embarazos múltiples, los niveles de hierro pueden caer dramáticamente causando anemia. Los alimentos ricos en hierro son las carnes rojas, de aves y pescado.

Calcio

En el embarazo se están desarrollando dos o más conjuntos de huesos y dientes, la ingesta de calcio es aconsejable, sobre todo en el último trimestre. Se apunta un consumo total de 1.200 mg por día, que equivale a cuatro porciones de lácteos que encontramos en el yogur, queso, helados y leche.

El ácido fólico

Es importante para el crecimiento del cerebro y el desarrollo neurológico, es esencial en la prevención de defectos del tubo neural como la espina bífida. Como se están desarrollando dos o más pequeñas mentes, el ácido fólico es muy importante, especialmente durante el primer trimestre.