Dolor de pies en el embarazo

El dolor de pies es uno de los problemas más habituales entre las mujeres embarazadas, y la situación empeora a medida que van pasando los meses de gestación.

Los pies siempre doloridos de una mujer embarazada son fruto del aumento de peso que sufre durante la gestación, y que llega a cambiar su centro de gravedad.

Al ocurrir esto, la presión del cuerpo pasa a sus pies y rodillas, que son los que tienen que realizar el mayor esfuerzo para aguantar el cuerpo.

La mejor manera de evitar el dolor de pies a lo largo de los meses de embarazo es proporcionar un soporte adecuado al pie, que le permita soportar el peso en las mejores condiciones posibles. Esto se consigue con unos zapatos cómodos, como zapatillas de gimnasia, y también con el uso de plantillas especiales.


La hinchazón de los pies


También es muy habitual que, además de presentar dolor, los pies de una mujer en estado de gestación se hinchen. Los edemas aparecen en el tercer trimestre de gestación y son causados, esencialmente, porque la presión del útero al crecer provoca problemas circulatorios.

Algunos consejos básicos para intentar reducir al máximo la hinchazón, o el edema, en los pies de una embarazada son:

– Poner los pies en alto

– Usar medias que no corten la circulación de la sangre

– Si se trabaja sentada muchas horas, parar de cuando y estirar las piernas.

– Intentar caminar un buen rato cada día

– Evitar la sal en las comidas, para reducir las posibles retenciones de líquidos.


Causas de la hinchazón de pies


La hinchazón exagerada, y dolorosa, de los pies de una mujer embarazada viene causada por una combinación de factores, relacionados con la gestación. Los desequilibrios hormonales propios del embarazo, la disminución de la actividad física y la congestión venosa son tres de sus principales causas.

Hay que tener en cuenta que el aumento de peso que se experimenta a lo largo de todo el embarazo, evita que el sistema circulatorio funcione de manera adecuada. Incluso pueden aparecer venas varicosas y coágulos en la sangre, debidos a la pérdida del funcionamiento adecuado de las válvulas de las venas


Otros posibles problemas en los pies durante el embarazo


La hinchazón y el dolor son dos de los principales problemas que puede sufrir una mujer embarazada en sus pies, pero hay que tener en cuenta la posibilidad de que padezca colapsos y fascitis plantar, debidos en buena parte a las mismas causas que hemos citado anteriormente.

Teniendo en cuenta esto, es esencial que la mujer elija con cuidado un zapato deportivo cómodo, que además le sirva de apoyo para pies, piernas y resto del cuerpo. En estos meses, los zapatos de tacones altos quedan prohibidos, ya que dejan los tobillos expuestos a lastimarse, por el desequilibrio provocado por el peso extra del embarazo.


Los masajes en los pies


Una de las cosas que hará sentir mejor a una embarazada es que le den un buen masaje en los pies. También puede hacérselo ella misma, apoyándose contra la pared, doblando uno de los pies y masajeándolo suavemente, mientras se tiene la otra pierna extendida. No hay que olvidar prestar especial atención a los dedos, tobillos y pantorrillas.