Pubalgia: dolor de pubis en el embarazo

En la última fase del embarazo, el niño empieza a colocarse de la manera correcta para que se lleve a cabo el parto, y lo hace situándose en la zona de la pelvis de la madre, con lo que se acaba creando una importante presión en esta zona, que se manifiesta con dolor.

Es lo que se conoce como pubalgia en el embarazo.

Dado que en las mujeres embarazadas es importante controlar al máximo la ingesta de medicamentos, es importante que se tomen las precauciones necesarias para prevenir, en lo máximo posible, la aparición del dolor de pubis durante sus meses de gestación.

Estas conductas de prevención necesarias se traducen, sobretodo, en no hacer gestos que comprometan los músculos de esta área, como subir escaleras, o inclinarse para ponerse unas medias.


La pubalgia en el embarazo


La aparición de dolor de pubis a lo largo de los últimos meses de embarazo hay que entenderla como la reacción lógica del cuerpo de la futura madre ante el efecto relajante de la progesterona en los músculos del pubis, y también como fruto del cambio de postura, que adopta la mujer embarazada cuando el crecimiento de su bebé provoca que su eje corporal se displace hacia adelante.


Cómo aliviar el dolor de pubis en el embarazo


La pubalgia no es un problema de salud importante ni para la madre, ni para el feto, pero sí que resulta algo muy doloroso y desagradable para algunas mujeres. Por eso, es importante buscar opciones que les permitan eliminar este dolor, o al menos paliarlo en todo lo posible.

Actualmente, los ginecólogos y obstetras recomiendan que una mujer embarazada, y que padece pubalgia, recurra a la aplicación de terapias físicas naturales para aliviarse, como la osteopatía, o actividades de relajación en el agua.

Si, pese a estas técnicas, el dolor sigue siendo muy importante, se debe consultar con un médico que regule cual es el analgésico adecuado para una mujer con estas molestias, y con un embarazo en curso.


Pequeños trucos para aliviar el dolor de pubis


Sacar las dos piernas a la vez de un coche, o usar las dos cuando se está cargando un peso importante, es un buen truco para conseguir paliar, en lo posible, el dolor en el pubis de una mujer embarazada.

Asimismo, hay que evitar estar demasiado tiempo de pie, y si es necesario, hay que realizar pequeños descansos cada 20 minutos. Descansar mucho y poner un cojín entre las piernas son otras precauciones importantes a la hora de estar un poco mejor.

No podemos olvidar que el dolor de pubis se da porque el cuerpo de la futura madre se esta adaptando al momento del parto, facilitando que el niño pueda pasar por él. En ese proceso también interviene la relaxina, que hace que se relajen los ligamentos de la zona púbica. Esto provoca que aumente más el dolor de pubis de la gestante, conocido también como pubalgia.